De perdices, zapatos y engaños

Despues de años viviendo en su cuento perfecto, Cenicienta se dio cuenta de que los príncipes no te salvan, ¡que inocente ella!

Asique llegó el dia en que la Cenicienta dijo BASTA , y entonces apareció su hada.

He de contaros que las hadas son gorditas, peludas y morenas, que están dentro de nosotras , y que salen cuando por fin dices BASTA .

Cuando el hada vio a Cenicienta la abrazó tan fuerte que la estrujó para que pudiese sacar toda la tristeza que guardaba dentro. Se sintió tan aliviada…¡ hacia tanto que no lloraba!

Lo lloró todo! Y se sintió mejor que nunca…VACIA. Por fin. ( ¡Con el miedo que le daba a ella quedarse vacia! )

Para sellar esta nueva amistad, Cenicienta y el Hada, decidieron ponerle fin a esa historia contada generación tras generación, y prometieron nunca mas engañar a ninguna niña con príncipes, perdices felices y zapatos de cristal.


FIN…y asi comienza un nuevo cuento ;)

Dejar la linea, torcerse

Me gusta escribir. Escribirme.

Puede q sea mi forma de comunicarme conmigo.

Tantas horas con uno mismo, y ¡aun sin conocernos! Parece paradójico, ¿verdad?

Creo q con el tiempo nos enrarecemos, y nos cuesta mas entender porque seguimos haciendo las mismas tonterías, o porque no nos atrevemos a eso que siempre nos queda pendiente.

Muchas veces pienso que si algo no te sale como te gustaría, ¿porque no cambiar de estrategia? ¿Porque seguir en la misma línea desdibujada pero grabada a fuego ? Desvíate de lo establecido. ¿ qué perderías ?

Es muy difícil ser otro. Creo que hay cosas que no cambiarán, ni con el tiempo, ni alterando el santísimo orden de la naturaleza.

Aunque como alguna vez leí por ahí: “Seamos realistas, pidamos lo imposible “.