sábado, 3 de abril de 2010

...

-¿Te quedarás conmigo?

-Quedarme contigo... ¿para que? ¿Para estar siempre discutiendo?

-Eso es lo que hacemos, ¡Discutir! Tu me dices cuando soy un maldito arrogante, y yo te digo cuando das mucho la tabarra. Y lo haces el 99% del tiempo. Se que no puedo herir tus sentimientos, porque tienen un promedio de dos segundos de rebote y otra vez vuelves a la carga...

-¿Entonces que?

-Pues que no será fácil. Va a ser muy duro. Tendremos que esforzarnos todos los días, y quiero hacerlo, porque te deseo. ¡Quiero tenerte para siempre! tu y yo, todos los días.